El ararteko Manuel Lezertua ha participado en las XV jornadas de la Red de Fiscales de Medio Ambiente y Urbanismo que se celebran en Ávila, con una ponencia sobre “La obligación de las administraciones públicas de regular zonas de bajas emisiones contaminantes”.
En su intervención, el ararteko se ha referido a la Recomendación general del Ararteko para la mejora de la regulación de las zonas de bajas emisiones en Euskadi, presentada en febrero del 2024 como la principal aportación de esta institución sobre esta cuestión. En esa recomendación, el Ararteko recogió una serie de principios que deben informar la aprobación de los planes de movilidad urbana sostenible y la regulación de las Zonas de bajas emisiones. Dentro de esos principios se incluye el de proporcionalidad y de motivación de las medidas a adoptar, el de no discriminación y de transición justa, el principio de no regresión medioambiental o el principio de emergencia climática.
La implantación de estas medidas como son las zonas de bajas emisiones está sufriendo un retraso generalizado debido a dificultades técnicas, jurídicas y sociales.
A estos obstáculos, se ha sumado la resistencia de ciertos colectivos que han planteado objeciones por las dificultades que, a su juicio, pueden generar las restricciones de tráfico de vehículos a motor en las ciudades para el ejercicio de sus derechos y libertades.
Existe también una reivindicación creciente por parte de otros colectivos ciudadanos y ecologistas para que se cumplan las obligaciones de reducción de las emisiones de GEI y para que se implanten de inmediato las medidas previstas en la ley destinadas a promover unas ciudades más limpias, seguras y sostenibles.
Esa inacción administrativa en algunos municipios, que aún no han iniciado el diseño de sus ZBEs, o el riesgo de la falta de ambición en la delimitación de las zonas de bajas emisiones, que pueden quedar reducidas a las zonas verdes o peatonales ya existentes en los centros urbanos, o incluso el de regresión en las zonas ya existentes, ponen en riesgo el cumplimiento de los plazos legales y de los objetivos de reducción del uso de vehículos contaminantes y del cambio modal a otros medios de transporte más sostenible.
“Desde el Ararteko, -ha dicho Lezertua- hemos venido instando a las administraciones públicas a actuar con determinación, sin olvidar que la inacción no solo pone en peligro la salud de la ciudadanía y el medio ambiente, sino que también puede derivar en responsabilidades legales”.
El ararteko ha subrayado que “la acción climática o el derecho a un domicilio libre de contaminación no es solo una aspiración, sino un derecho fundamental, tal y como ha venido reconociendo el propio Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Para ello, las ZBEs representan una de las herramientas clave para garantizarlo. Su éxito dependerá de la voluntad y el compromiso de las administraciones públicas y de la aceptación de la propia ciudadanía”.
INTERVENCIÓN DEL ARARTEKO
Vitoria-Gasteiz, 28 de enero de 2025