70 aniversario del Convenio Europeo de Derechos Humanos
El 4 de noviembre de 1950, 12 países europeos firmaron en Roma el Convenio Europeo de Derechos Humanos. Fueron el Reino Unido, Francia, Luxemburgo, Bélgica, Países Bajos, Italia, la República Federal de Alemania, Turquía, Irlanda, Dinamarca, Islandia y Noruega. Días después, se incorporaron Suecia y Grecia.
El Convenio estableció un listado de 13 derechos humanos, el compromiso de los países para respetarlos, una Comisión para supervisar el cumplimiento y un Tribunal, aunque este último era opcional.
A lo largo de estos 70 años, 35 estados europeos más se han sumado al acuerdo, de manera que casi todos los países de Europa están obligados hoy en día a respetar los derechos que establece. España ratificó el Convenio tras la vuelta a la democracia, en 1979.
Desde entonces, el sistema ha cambiado. Se han sumado al acuerdo varios protocolos adicionales, que establecen más derechos. Además, el Tribunal ya no es opcional sino obligatorio. Esto significa que cualquier persona, de cualquier nacionalidad, con residencia legal o sin ella, que crea ser víctima de la violación de un derecho del Convenio o de los protocolos, puede poner una demanda internacional contra el país europeo que haya violado sus derechos. Para ello, primero tiene que agotar todas las instancias judiciales en ese país.
El Ararteko os invita a conocer el Convenio y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos:
· El texto del Convenio y los derechos humanos que protege en este vídeo.
· ¿Cómo funciona el Convenio Europeo de Derechos Humanos?
Entre 1959 y 2019, el Tribunal dictó más de 22.500 sentencias, 250 de ellas, en casos presentados contra España. Sin embargo, más importante que el número de sentencias es su efecto en las vidas de las personas y en el Derecho de los países.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos nos permite conocer historias de personas que ganaron juicios contra sus países. A través de vídeos, entrevistas y resúmenes, podemos aprender, de primera mano, cuál ha sido el efecto de las sentencias del Tribunal.
Gracias a las sentencias de este Tribunal, en algunos países la homosexualidad dejó de estar prohibida, se reconocieron los iguales derechos de los hijos extramatrimoniales, el derecho a la asistencia jurídica gratuita o se compensó a las víctimas del atentado en la escuela de Beslan (Rusia).
En España, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos amparó la libertad de expresión de un senador, corrigió injusticias en los procesos penales, indicó la necesidad de investigar las alegaciones de tortura y recientemente, protegió a manifestantes pacíficos frente a cargas policiales.
Para el Ararteko es indispensable que la ciudadanía conozca sus derechos y por eso celebra este aniversario del Convenio Europeo de Derechos Humanos, un hito fundamental en la historia de Europa.
2 de noviembre de 2020