Curso organizado por el Ararteko sobre los problemas derivados del régimen de protección de los bienes culturales en el País Vasco

El ararteko Manuel Lezertua ha inaugurado esta mañana el curso "Problemas derivados del régimen de protección de los bienes culturales en el País Vasco", impulsado por la institución del Ararteko en el marco de los XXXVI Cursos de Verano de la UPV/EHU.

El objeto de esta jornada es propiciar el debate entre los diferentes poderes públicos y grupos de interés en defensa del patrimonio cultural vasco.

En su intervención, el ararteko Manuel Lezertua ha señalado que "el patrimonio cultural debe centrar su mirada en la huella o el legado que ha sobrevivido al paso del tiempo, más o menos remoto, y que nos permite reconocer los valores sobre los que hemos ido construyendo nuestro presente, sobre el que proyectamos, a las próximas generaciones, nuestro futuro".

También se ha referido al papel del Consejo de Europa en la salvaguardia del patrimonio arquitectónico y al mandato constitucional para proteger el patrimonio histórico, cultural y artístico.

El patrimonio cultural dispone de un régimen de protección que recoge la Ley 7/1990, de 3 de julio, de Patrimonio Cultural del País Vasco. Esa ley ha desarrollado un marco legal por el cual los bienes muebles, inmuebles e inmateriales, provistos de valores culturales, resultan merecedores de protección y defensa.

La conservación de los bienes culturales conlleva un mandato a los distintos poderes públicos vascos para su protección, conservación y puesta en valor. La legislación cultural establece un complejo reparto competencial dentro del entramado institucional vasco (Gobierno Vasco, diputaciones forales y ayuntamientos).

Por otro lado también sus propietarios están obligados a conservarlos, cuidarlos y protegerlos debidamente para asegurar su integridad y evitar su pérdida, destrucción o deterioro.

Al mismo tiempo, existe en Euskadi una amplio entramado asociativo que, potenciado por la acción pública que recoge la legislación, tiene dentro de sus objetivos la defensa del patrimonio cultural ante las administraciones públicas.

Esa corresponsabilidad pública-privada ha supuesto en la práctica conflictos entre los propietarios, administraciones y asociaciones respecto al correcto ejercicio de esos derechos y obligaciones.

A lo largo de estos años han sido varias las actuaciones del Ararteko relacionadas con el reconocimiento y la defensa de estos bienes culturales protegidos por sus valores históricos, arquitectónicos, arqueológicos o paisajísticos.


Donostia-San Sebastián, 6 de julio de 2017


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