La Ararteko recomienda al Ayuntamiento de Bilbao que autorice la apertura del servicio Hontza

La Ararteko ha remitido una recomendación al Ayuntamiento de Bilbao, indicándole que autorice formalmente y con urgencia la apertura del servicio de atención a personas drogodependientes Hontza. En el escrito se insta al Ayuntamiento a que dé los pasos necesarios para la reanudación de las actividades del citado centro con las máximas garantías para su correcto funcionamiento, tanto para las personas usuarias del mismo como para los vecinos y vecinas de la zona.

Tras recibir una queja de la comunidad de propietarios Zamakola, 9, personal de esta institución solicitó información y ha mantenido diversas reuniones con responsables municipales. Además se ha recabado información adicional de los responsables de Cáritas, se han visitado las instalaciones y analizado su ubicación, proyecto de trabajo y servicios prestados mientras estuvo en funcionamiento.

A la hora de analizar el expediente administrativo relativo a la licencia de apertura, la Ararteko defendió la conveniencia de efectuar el trámite de audiencia a los vecinos y vecinas, ofreciéndoles la posibilidad de que hicieran llegar, formalmente, sus alegaciones.
De acuerdo con toda la información recabada, la Ararteko ha concluido que el Ayuntamiento debe autorizar la apertura del servicio, ya que la norma que debe tener en cuenta la administración municipal a la hora de otorgar una licencia es la norma urbanística.

La institución del Ararteko, al igual que otras instituciones como el propio Parlamento Vasco, siempre ha defendido la necesidad de servicios y centros sociosanitarios de acogida a personas drogodependientes activas y ha impulsado su creación.

También ha defendido la necesidad de que los responsables institucionales impulsen estos proyectos que, sobre todo en sus inicios, pueden suscitar la preocupación entre las personas más directamente afectadas por ellos. Por ello, el liderazgo institucional debe buscar la sensibilización social, el apoyo a las iniciativas sociales solidarias, la colaboración con los agentes sociales más comprometidos en la defensa de los excluidos y la garantía del correcto funcionamiento de los servicios.

Además, los datos conocidos sobre la población de personas drogadictas activas y sin techo en Bilbao, así como los datos de utilización del centro Hontza en las noches en que permaneció abierto, muestran no sólo la necesidad de este servicio, sino también su insuficiencia en un plazo corto de tiempo.
 

Vitoria-Gasteiz, 15 de octubre de 2001