Una actuación confusa de la SPRI impide el acceso a subvenciones a algunos ciudadanos.

Un ciudadano presentó una queja a la Ararteko porque la SPRI (Sociedad para la Promoción y Reconversión Industrial, S.A.) había denegado una subvención del programa Konekta Zaitez para la compra de un ordenador portátil. En su queja nos relataba que adquirió un ordenador portátil el 18 de noviembre de 2000, sin esperar a la fecha exigida por el programa subvencional Konekta Zaitez (día 27 siguiente), al comprobar que el anuncio del programa, publicado en el Boletín Oficial del País Vasco de 16 de noviembre anterior, exigía unas condiciones técnicas que en ningún caso iba a poder cumplir, condiciones que no estaban al alcance de un usuario medio.

Sin embargo pocos días después de publicarse el anuncio, el Consejo de Administración de la SPRI, acordó, sin ninguna justificación objetiva, rebajar sustancialmente las especificaciones técnicas requeridas con carácter de mínimas a los ordenadores portátiles. Las nuevas condiciones se publicaron en el Boletín Oficial del País Vasco del día 24 de noviembre.

El reclamante nos señalaba que, de haber sabido que las exigencias técnicas no iban a ser las publicadas en el anuncio oficial, hubiera realizado su compra ajustándose a las condiciones finalmente exigidas y en los plazos estipulados. Nos indicaba que estaba dispuesto a adaptar el ordenador a las características técnicas finalmente exigidas, para así poder beneficiarse de las ayudas del programa.

Analizada la queja, la Ararteko consideró que la SPRI, al introducir tan sustanciales modificaciones en la configuración del programa subvencional una vez publicado, provocó la quiebra de la confianza legítima que había generado en los particulares cuando estableció las condiciones del programa. Para evitar esta pérdida de confianza, en la recomendación, que ha sido desestimada, se pedía que se reconociera al interesado la ayuda solicitada si adaptaba su ordenador a las condiciones que finalmente rigieron la concesión de las ayudas.

Vitoria-Gasteiz, 9 de julio de 2002